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Me gusta todo de ti.

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lunes, 24 de noviembre de 2014

Capitulo 3.5

    3.5


Después de un buen paseo en autocar , hemos llegado al Gran Cañón , sinceramente estoy alucinando es que aun no me creo que esté en Estados Unidos y mejor aún , en Nevada , en el Gran Cañón y que el encargado de cumplir ese sueño no haya sido Luis como yo pensaba si no Sergio , mi jefe rubio , guapo , apuesto y buenorro. Nada más bajar del autocar el guía nos invita a caminar hacia el mirador y Sergio y yo lo hacemos encantados , ahí puedo observar perfectamente la escarpada garganta formada por el río Colorado. 

—Tiene unos 446 km de longitud , cuenta con cordilleras de entre 6 y 29 km de altura y alcanza profundidades de mas de 1600m. — Nos explica el guía.—La mayor parte de las rocas sedimentarias que se pueden observar en el Gran Cañón van desde los 2000 millones de años de antigüedad de los esquistos situados en el fondo del Inner Gorge hasta los 230 millones de años de las viejas piedras calizas de 'lucass'.
Ignoro solo unos segundos la información por que mi vista se va sola hacia un hombre , de ojos azules cristalinos , mas claros que los de Sergio y cabello rubio ceniza. Se dirige hacia nosotros pero lo ignoro mientras sigo escuchando la información del Cañón.

—La gran profundidad del Gran Cañón y especialmente la altura de sus estratos se puede atribuir a los 1500-3000 m de elevación de la meseta del Colorado.— Sigue informando nuestro guía de habla hispana.
Entonces para mi sorpresa , Sergio ve a dicho hombre y le abre los brazos con una amplia sonrisa que permite ver su dentadura. Ambos se dan un abrazo , el típico abrazo de que no se han visto en meses u en años, me cruzo de brazos y me quedo al margen haciendo como que escucho al guía pero en cuanto se separan pongo la oreja en su conversación:

—¡Pero tío! ¿Que haces por aqui?.— Le pregunta el de los ojos bonitos a mi jefe.

—Pues ya sabes tío , la semana de la moda, este año me ha tocado venir a mi por la empresa y tal. ¿Y tú que?.— Responde Sergio cruzándose de brazos.

—He venido a ver como van los restaurantes ya sabes y así de paso cambio de aires.— Ambos rieron y entonces Sergio rápidamente se giró.

—Mira Víctor , ella es Mara. Mara, él es Víctor un buen amigo mío de casi toda la vida.— Sergio nos presenta.

Me acerco al tal Víctor y le doy dos besos en las mejillas los cuales , si no giro más la cara me los hubiese dado en las comisuras de los labios, más le vale que sea solo un despiste de él y que no esté intentando nada por que con buena ha dado. El de los ojos bonitos clava sus ojos en los míos casi de la misma forma que lo hizo Sergio en el primer encuentro en el Reina Bruja, lo cuál hace que yo me ponga nerviosa y retroceda un paso atrás colocándome al lado de Sergio.

—¿Es tu novia colega?.— Pregunta Víctor sin quitarme ojo.

Sergio se percata de que su amigo se esta pasando demasiado mirándome y entonces me agarra por la cintura y me atrae hacia él.

—Así es.— Responde él.

Mis ojos se abren como platos y lo miro rápidamente , el me sonríe con complicidad y con esa sonrisa entiendo que quiere que finja así que ¿por que no? Será divertido. Sonrío ampliamente y miro hacia delante agarrándome a la cintura de mi jefe. Nuestro grupo de excursión se mueve y debemos irnos. Así que Sergio se separa de mi solo un instante para abrazar a su amigo y acto seguido , el de los ojos bonitos se acerca a mi , me coge la mano y la besa de una forma muy seductora , tanto que me atrevería a decir que me han temblado levemente las rodillas.

—Un placer Mara.

Yo asiento a modo de igualdad y entonces Víctor se marcha.

Sergio y yo seguimos con nuestro grupo observando el maravilloso Gran Cañón y volvemos a prestar atención a las informaciones de nuestro guía.

—Las condiciones climatológicas de mayor humedad que se dieron durante las glaciaciones incrementaron la cantidad de agua recogida por el área de drenaje del río Colorado. La consecuencia fue que el río aumentó la velocidad y profundidad de su proceso erosivo durante estas épocas.

Dejo de atender al guía un momento pero sigo con mi vista al frente y me lanzo a preguntar.

—¿Tú novia?

Por el rabillo del ojo veo que Sergio me mira y sonríe divertido.

—¿Te ha molestado?

Niego con la cabeza.

—No, pero, ¿por qué le has dicho eso?

Sergio vuelve su vista al frente y entonces soy yo quien giro la cabeza para mirarle con curiosidad.

—He visto como te miraba.— Yo frunzo el ceño y lo miro.

—¿Y?.— Pregunto confusa.

Sergio suspira sin mirarme y responde.

—Es complicado , quizá mas adelante te lo explique.

Vaya , don misterio vuelve al ataque. No se hace una idea de lo que odio los misterios pero a la vez eso hace que quiera saber mucho más de todo lo que habla y de él. La vistita se está terminando y Sergio rápidamente me aparta un poco , apoyandonos en la barandilla del mirador.

—¿Te haces una foto conmigo? De recuerdo.

Me sorprende aquella propuesta pero asiento accediendo. Mi jefazo saca su móvil y abre la aplicación de la camara de fotos , entonces pone el temporizador y gira el móvil pegando su rostro al mío , él sonríe y yo sonrío y después de cinco segundos..¡Click! Momento capturado. Sergio da la vuelta a su móvil para ver la foto y me la enseña, la verdad es que salimos realmente perfectos.

—Otra.— Le pido con una sonrisa y el accede.

Vuelve a girar el móvil y cuando pega su mejilla a la mía yo giro la cabeza, pegando mis morritos a su mejilla dándole un beso en ésta y sonrío como sus músculos de la cara se estiran mas lo que me indica , que está sonriendo más que antes. El proceso se repite y después de cinco segundos queda inmortalizado el momento , el rubio me muestra la foto y yo sonrío al verla pidieédole que me pase las dos. Sin dudarlo lo hace y mientras se envían nuestra visita al Gran Cañón se termina. 
Subimos al autocar y nuestros asientos de antes están vacíos así que volvemos a cogerlos. Ésta vez lo dejo a él en la ventanilla pero se niega , me deja el sitio a mi por que creo que en el fondo sabe que me encanta, cuando nos sentamos no dudo en presumir un poco y paso nuestras fotos pro el grupo de whatsapp que tengo con las chicas. Ahora solo me queda esperar que respondan y me imagino las respuestas de cada una..Me río sin querer de pensarlo y Sergio me mira extrañado, entonces guardo el móvil antes de que pregunte o quiera saber de que me rio. Él autocar arranca y me despido con la mirada del Gran Cañón , ha sido realmente genial estar allí, espero volver algún día aunque llevo varias fotos de recuerdo.

—¿Estás cansada?.

Dejo de mirar por la ventanilla y lo miro a él negando con la cabeza.

—Tenemos el primer desfile esta tarde. Un estilista irá a tu habitación a vestirte.

Yo frunzo el ceño en seguida al oirle. ¿Un estilista? ¿En serio? ¡Que pasada! Voy a sentirme como una famosa por un ratito, aunque espero que me escojan un buen modelito por que con la de bellezas que habrá allí no destacaré mucho ante Sergio.


Ya estoy lista, peinada, maquillada y vestida para el desfile de esta tarde. El estilista y el maquillador no han dejado que me vea todavía y yo estoy muy nerviosa por que no sé que me han hecho ni como llevo el pelo, creo que es un recogido y puedo ver en mi muñeca una preciosa pulsera negra brillante y un anillo enorme en mi dedo corazón del mismo color. El vestido es largo e intuyo que tiene un poco de cola , es de un color azul marino con pedrería de color negro que van desde mi cadera hasta mi pecho , formando como si fuera una cola de sirena , es palabra de honor con un poco de forma pero no llega a ser en forma de corazón. Los estilistas se apartan de mi y el peluquero súper simpático me tiende la mano para que me ponga de pie , me incorporo y me guía hasta el espejo pero antes de llegar me tapa los ojos y yo estoy histérica. Me gira levemente haciendo que quede frente a este y cuando destapa mis ojos puedo ver mi reflejo, estoy incluso emocionada no..No parezco yo , el vestido es mucho mejor de lo que yo podía ver y sí, tiene una pequeña cola y marca perfectamente mi figura, efectivamente llevo un recogido un moño precioso , pendientes de brillantes plateados, sombra de ojo y delineador negro y un maquillaje muy suave combinado con un gloss transparente. Estoy realmente guapísima, creo que estaré a la altura de Sergio el cual en ese momento creo que esta llamando a la puerta.

El maquillador va a abrir apresuradamente y escucho los pasos de Sergio resonar por la moqueta , cuando llega al interior de la habitación me giro y lo veo mirándome de arriba a abajo ensimismado , asombrado , sorprendido y veo incluso que le brillan los ojos. Dios mío está realmente guapo , como esmoquín , pajarita negra, esta radiante. Tiene la boca entre abierta, como si quisiera decirme algo pero no encuentra la palabra adecuada, entonces se acerca a mi y logra decir:

—Estás realmente radiante Mara. Hasta las modelos van a envidiarte hoy.

Me sonrojo inmediatamente y más aún cuando coge mi mano y la besa mirándome a los ojos, sonrío con una tímidez inpropia de mi.

—Puedo decir lo mismo, los modelos de Calvin Klein no van a tener nada que envidiarte a ti.
El estilista me da un pequeño bolso de mano negro, es como si fuese una cajita redonda, de material, mis pertenencias ya están dentro y Sergio me coge de la mano para salir de la habitación no sin antes agradecerles tanto él como yo , el trabajo que han hecho conmigo.

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