Capitulo 1.2.

  1.2



Justo cuando estoy terminando de cenar y dejo el tenedor sobre el plato , suena el telefónillo , es Isa no hay duda lo sé por que está llamando como si no hubiera un mañana. Me levanto del sofá de un brinco y corro hacia el recibidor , descolgando el telefonillo y ni lo atiendo directamente abro , y seguidamente abro tambien la puerta , esperandola en el marco impaciente.

En menos de unos segundos la tengo frente a mi y ambas saltamos , gritamos , nos emocionamos y reímos a carcajadas mientras nos damos el mayor abrazo del mundo. Acto seguido cuando al fin conseguimos soltarlos y apartar las lágrimas de felicidad de nuestros rostros la hago pasar y cierro la puerta , está flipando , literalmente con el piso y rápidamente se tira al sofá , recuerdo que siempre hablaba que quería uno así cuando viviera sola por que le encantaban los sofás que hacen una ele , blancos y de cuero. Me siento a su lado y empezamos a charlar , me cuenta lo increíble que es Madrid , las fiestas que se ha pegado con los compañeros de Universidad y la de cosas que ha hecho estando pedo , yo no puedo evitar reirme a carcajadas sólo de imaginarla , también me habla de lo mucho que echa de menos a David aunque estuvo aquí hace poco vistandola , tiene ganas de volver a Sevilla pero a la vez no y la entiendo , acabo de llegar y echo muchisimo de menos a mis padres , a mi familia , el ambiente de mi barrio , las vecinas , la plaza..Todo , pero necesitaba salir de allí y respirar otro aire. Luego me pregunta que como están las cosas por allí y yo le soy sincera , cada uno va a su aire , todo ha cambiado lo que pensé que nunca pasaría estaba pasando y por aquel mal ambiente fue por el que quería salir de allí y sobre todo , para no tener que seguir viendo las escenitas de "amor" de Luis y Marta. En cuanto le digo eso se crispa y me pregunta que si aun siguen juntos y yo riendo asiento.  Luego le pregunto por Miriam , quería verla pronto también y ella me dice que está a tope de trabajo y que pruebe con ella que necesita gente e inmediatamente niego con la cabeza , acabo de pedir un traslado y ZARA paga el piso , no pienso irme a otra empresa ni matarma a trabajr , yo sé perfectamente que el día que me falte el trabajo ella me tenderá la mano , pero tal y como estan las cosas..Puedo darme con un canto en los dientes del trato que me están dando aquí y no quiero marcharme.

Aunque en Madrid..Espero que sea el mismo trato agradable. Seguimos charlando de todo lo que nos hemos perdido , yo le cuento las novedades en Sevilla , le cuento mi pequeña historia con David que no funcionó , pero que seguimos siendo amigos aunque el ahora está en Estados Unidos , en Chicago para ser exactos y ella me cuenta que sus compañeros de la universidad están muy buenos , ambas reimos , sé que ya quiere presentarme a alguno pero yo no quiero , estoy bien así y además muy en el fondo sé que aún no he superado lo de Luis , si así fuese..No tendría ganas de que se atragantase con un trozo de pan cada vez que come. Pasan las horas como segundos a su lado despúes de tanto charlar y cuando me doy cuenta.. ¡La una de la madrugada! Isa me dice que se va y yo no se lo permito , a estas horas volver sola hasta el piso compartido que está más al centro , según me explicó estudiaba en la Universidad Rey Juan Carlos y tenía el campus en..¡Vicalvaro! Mi rizos se me vino rapidamente a mi cabeza , allí era donde ella vivía y le pregunté si por casualidad la conocía , rapidamente le enseñe su foto de WhatsApp y asintió. Me puse feliz y ella me dijo que siempre coincidian cuando compraban el pan o cuando ella llegaba de algún sitio la veía bajando a sus perros. ¡Que felicidad!

Despúes de explicarme todo aquello le digo que se quede a dormir , a parte de que no quiero que vuelva sola , tan tarde reconozco que yo tampoco quiero dormir sola en mi primera noche en Madrid , soy una miedica o una niña pequeña , lo que sea sí , pero prefería dormir acompañada esa nocha y ella sin dudar acepta. Vamos a la habitación y abro una de las maletas sacando dos pijamas uno para ella , de leopardo que sabía que le encantaba y sonrie en cuanto se lo doy y otro para mi rosa , de Hello Kitty por supuesto , me encanta esa adorable gatita. Volvemos al sofá despúes de cambiarnos y ella avisa a sus compañeros de piso para decirles que se queda conmigo a dormir , luego saco dos coca-colas y tabaco , nos fumamos un cigarro en la terraza , contemplando las hermosas vistas de la Puerta de Alcalá iluminada , y solitaria , apenas había tráfico ya , Isa estaba alucinando con el piso que había conseguido y la verdad yo tambien , estaba feliz , agusto , por fin podía respirar otro aire , otra ciudad , ya no sentía esa presión en el pecho que sentía en Sevilla , ese quebradero de cabeza que no me dejaba dormir o sonreir o ser yo , algo me decía que a pesar de que siempre había odiado Madrid..Éste era mi sitio , el sitio que me haría sacar a la verdadera Mara , el sitio que me haría ser feliz.

A la mañana siguiente me despierto , Isa y yo hemos dormido en la enorme cama de matrimonio , me doy la vuelta pero no la veo , lo que hace que frunza el ceño y me levante de la cama y ahí esta , en la cocina , jo..Me recuerda a la primera vez que dormi con ella y me hizo el desayuno , pues lo mismo está haciendo , aunque habrá ido a comprar al chino al que yo fui ayer , por que no tenía ni pan , ni mantequilla , ni mermelada , ni leche , ni nesquick.

— Buenos días dormilona.— Me dice con la voz dulce imitando a un bebé que siempre solía poner y me da un pico , si , era nuestro modo de saludarnos y despedirnos.

— Hola renita.— Respondí yo y me puse manos a la obra para hacer el desayuno con ella. — ¿No tienes clase? .— Pregunto al ver que eran las 8 y media y seguía en casa y en pijama , con su moño pelirrojo y sus gafas y ella niega con la cabeza.

— Hoy solo voy por la tarde un rato. Así que si quieres , podemos ir a dar un voltio por los madriles. ¿Te parece?— Propone mi pelirroja y yo me quedo pensativa.

—Más que un voltio , necesito un Mercadona.— Respondo y las dos reímos mientras caminamo con el desayuno a la pequeña mesa del salón.

— Pues yo te llevo , hay que ir en coche.— Me dice ella mientras da un mordísco a su tostada y pone la televisión y yo asiento , comenzando tambien a desayunar tranquilamente.


Subimos cargada de bolsas , en estos momentos si echo de menos un hombre fuerte que nos ayude , dios , un poco más y me traigo medio Mercadona a casa , no espera , creo que me lo he traído. Menos mal que hay ascensor nos montamo en el y subimos las bolsas fácilmente , salimos del mismo y abro la puerta a la primera , dejando las bolsas sobre la encimera y la barra americana de la cocina. Isa me ayuda a guardar todo por los muebles , la despensa y la nevera , también me ayuda y coloca la bolsa de basura en el cubo , el gel de baño y el champú los coloco en el cuarto de baño , junto con una colonia de vainilla y el deshodorante que me he comprado , pasta de dientes y cepillo nuevo también , los coloco en la pequeña repisa que hay encima del lavabo. Cuando termino de colocar las cosas del cuarto de baño; Detergente , suavizante , legía , fregasuelos , espuma para el pelo , laca etc..Salgo y veo que Isa tambien casi acaba de terminar de guardar las cosas , me enseña donde ha guardado la pasta y las legumbres y también en que mueble estan los dulces y el picoteo lo demas esta en la nevera y el congelador.

—Yo creo que me voy ya amor.

—¿No te quedas a comer?. — Pregunto.

— No , me encantaría pero no te preocupes la noche de hoy la vamos a disfrutar , llama a Miriam y dile que estás aquí y a tu amiga Lorena también. Hoy toca...

—¡NOCHE DE CHICAS!.— Exclamamos ambas al unísono.

Le doy un abrazo riendo aún despúes de exclamar las dos a la vez las mismas palabras y la acompaño a la puerta , cerrándola despúes de que ella salga. Voy a la cocina y me acerco a la encimera buscando un pequeño bolso negro , de mano , cuando lo encentro saco el móvil y marco el número de Miriam , a los dos tonos responde.

— ¡Hola gordita!.

— ¡Hola galletita! Tengo una noticia que darte.

— Sórprendeme.

—Estoy...En Madrid.

Miriam pega un grito que casi me deja sorda y aparto el télefono de mí oído.

—¡No me lo puedo creer! ¿¡Dónde estas!?.

— Calle Alcalá , número sesenta y nueve , sexto A.

— Hoy salgo a las tres , en cuánto salga voy ¿y comemos?.

— Estupendo te invito yo.

Y ambas colgamos , despúes de eso sonrio como una idiota..Desde luego tengo unas amigas que valen oro , me encanta que se pongan tan felices de verme.Cojo aire y busco el número de Lorena..Ya verás que bronca me va a echar por no haberla llamado antes , cuando lo encuentro doy  a llamar y al primer tono lo atiende.

— Hola , holita cuchu.

— Hola rizos ¿qué tal?.

— Buah , harta del trabajo , he llegado a casa hace cuestión de cinco minutos ¿y tú?.

— Yo...Aquí..En Madrid.

— ¡¡¡¡QUEEEEEEE!!!!! ¡¡DONDE!!!! ¡AY DIOS MORENA TE COMO!!

Río entre carcajadas por su reacción y aliviada la verdad , pensé que le molestaría no haberla llamado antes , enseguida me pide la dirección y otra más que se apunta a comer , haré spaguetti para todas y seguro que ella y Miriam se llevan bien.